lunes, 17 de junio de 2024

LO QUE OCULTAN LAS HOJAS CAP 3

 CAPITULO 3

LA INVITACIÓN


Después de que la ceremonia se llevase a cabo y yo pasase a unas mesas a recoger mi diploma, nos agruparon a todos para tomarnos la foto grupal. Mientras nos formaban pude ver a Emma, ella también me vio y nos saludamos con una visible sonrisa de que ese día celebraríamos hasta hartarnos.

Una vez tomada la foto grupal, cada quien se fue por su lado para tomarse fotos con sus familiares. En mi caso ese día además de haber venido mis padres también vinieron tíos, primos, pero a quienes más sorpresa me dio ver fue a mis abuelos que, al parecer habían viajado hasta acá para verme graduado.

Camine hasta donde estaban parados todos para saludarlos, pero antes de que pudiese decir algo, un primito se abalanzó sobre mí, se veía muy contento, de seguro estaba emocionado por volver a ver a su primo, o tal vez, estaba emocionado porque lo dejase usar la consola de videojuegos que tenía. Fuese como fuese, agarre y lo cargue para que se divirtiera más.

-Ya estas pesado primito-Le dije de broma para que se enojase.

En cuanto escucho esto agarro y me dio un rodillazo en el estómago que me saco casi todo el aire, por lo que tuve que bajarlo y este salió corriendo con su risita burlona, escapándose sin que yo pudiese hacer nada.

-Ya te atrapare chamaco grosero-Exclame en cuanto pude recuperar el aliento.

Volteé la mirada y vi como todos se estaban riendo de la situación mientras él se escondía detrás de mí tía y me sacaba la lengua burlonamente. Me limite a reírme también y me apresure a saludar a todos los presentes para poder saludar a mis abuelos lo antes posible. Mis padres me abrasaron bastante fuerte, se notaba que estaban felices por mí y por la reunión familiar que se había dado, saludé a todos mis tíos, pero fueron mis tías las que me saludaron con más entusiasmo, diciéndome que cuanto había crecido y que si ya tenía novia, me reí y les dije que también me daba gusto volver a verlas.

Después de la plática, quedaba saludar a mis abuelos, a simple vista estos se veían muy serios, personas de firme convicción que se habían criado toda su vida en el campo, pero la realidad era que ellos son bastantes cariñosos con sus nietos y siempre tenían algo que platicarles. Salude a mi abuela que me recibió cálidamente con un fuerte abraso, y a mi abuelo, que me dio un fuerte un fuerte apretón de manos, que era su manera de expresar su alegría por verme.



Aproveche que mis padres vinieron a hablar con mis abuelos, sin antes estos prometerme que más tarde prepararían la cena y me contarían sus anécdotas que han ido teniendo durante su vida, a simple vista eso sería algo aburrido, pero por alguna razón estas siempre me llamaron la atención. Saludé de puño al resto de mis primos, el pequeño ya se había ido corriendo a jugar con otros niños hace rato, y me fui a buscar a Emma, ya que habíamos quedado para platicar lo que quedaba del evento.

No tuve que buscar mucho para encontrarla, porque en un grupo de compañeros tanto de mi salón como de otros se había juntando en bola al parecer hablando de algo que les causaba mucho interés, y Emma estaba sentada en un banco a unos metros, estando atenta a lo que estaban hablando.

Le hice algunos gestos para llamar su atención, pero no funciono, estaba demasiado concentrada poniendo atención a eso, esto llamo aún más mi atención por lo que decidí acercarme a ella, evadí algunas sillas que estaban acomodadas en el alrededor y llegué a donde estaba.

-Emma-Le saludé, pero al mismo tiempo le hice un gesto con la cabeza para ver qué pasaba.

-Olí-Me dijo, y señalo con su mano una silla que tenía alado y me devolvió el gesto para que me acercara.

Tome la silla y me acerque para ver que estaban haciendo, y de paso platicarle acerca del sueño que acababa de tener y, aun me tenía bastante pensativo.

- ¿Y qué están haciendo? -Le pregunte cuando acabe de acomodarme en la silla.

-Pues por lo que tengo entendido se están poniendo de acuerdo para hacer una fiesta o algo, supongo que para festejar la graduación.

- ¿Y vas a ir?

-No sé, de momento no me llama mucho la atención, solo me senté a escuchar acá porque estaba aburrida. Y dime, ¿tú vas a ir?

-La verdad no lo creo, a mí no me gustan mucho esas cosas, además voy a estar con familiares toda la tarde. Y pues la verdad no creo que me dejen ir ni aunque quisiera. -Tome el teléfono para revisar la hora, faltaban 4 minutos para que dieran las 12.-Oye revisando me acabo de acordar de que te quería contar algo, sobre un sueño medio loco que tuve apenas.

Ella giro su cabeza para verme, visiblemente interesada en saber de qué trataba.

-Haber cuéntame de que trato.

Estaba a punto de platicarle cuando cae en cuenta de que estábamos rodeados de personas, lo que ocasionó que la pena me invadiera por los “detalles” del sueño, a lo mejor pensarían que estoy medio loco o algo así

-Es que hay mucha gente, mejor te lo cuento al rato por mensaje. Le respondí mientras miraba alrededor todas las personas que había.

-Ahora me lo cuentas, ya me disté curiosidad como para dejarme con la duda. -Me respondió, dándome una mirada que me decía que no tenia de otra.

-Está bien pues, pero vamos a otro lado porque acá hay un montón de gente.

Ella asintió, levantándose de su silla para ir a otro lado, yo yendo detrás de ella. Caminamos hasta fijarnos en unas jardineras donde no había mucha gente y aparte se escuchaba menos escándalo, por lo que sería más cómodo platicar. Nos sentamos en un banco que había y procedí a contarle lo que paso.

-Pues mira, como te lo cuento. ¿Alguna vez no te ha pasado que sientes que un sueño es muy real? En plan que despiertas y hasta te preguntas por un momento si realmente paso o no lo de tu sueño.

-Pues sí, una vez soñé que estaba en el asiento trasero de un coche acostada y este de repente frenaba y yo sentí esa sensación que sientes cuando te tropiezas, luego luego me desperté, hasta pensé que a lo mejor en un momento estaba por caerme de mi cama y mi mente reacciono así con ese sueño para alertarme o algo.

-Pues algo así me paso, no se es complicado, veras yo como que me avía despertado en un sitio medio raro, pero te juro que se sentía real, hasta podía como pensar e interactuar libremente con el entorno.

-Mmm, sígueme contando, ¿Cómo era ese lugar?

-Haz de cuenta que era como una especie de cobertizo, porque había un montón de cosas guardadas, y era como rural porque recuerdo que el piso era de tierra ahora que hago memoria, y estaba echo como de piedra y palos, pero bueno, frente de mi estaba la puerta, que era la única que había. -Le conté tratando de ser lo más detallado posible.

-Jajaja me imagino que a lo mejor pensaste que te secuestraron o algo. -Me dijo en tono burlón.

-De hecho, precisamente eso fue lo primero que pensé, pero eso no es lo más sorprendente del sueño, cuando abrí la puerta, había un árbol gigante, lo digo enserio, era más alto que un edificio, y alrededor estaba rodeado como de montañas o cerros, y había mucha neblina.

En ese momento me fije que había 2 de los compañeros que estaban en aquel grupo que Emma estaba escuchando viniendo hacia nosotros, yo le hice un gesto con la mirada señalando hacia su dirección, y ella al darse cuenta me pico la pierna para que disimulara y cambiáramos momentáneamente de tema

-Oliver, Emma, los andábamos buscando.

- ¿Qué paso? -pregunte, sin saber muy bien el motivo.

-Es que varios compañeros de nuestro grupo y de otros grupos andamos planeando reunirnos, tipo una fiesta ya sabes, y les queríamos preguntar a los 2 si querían ir.

-No estoy seguro de que pueda ir yo. -Respondí.

-Yo tampoco estoy segura, pero en el caso de llegarse a poder, ¿Cuándo va a ser y dónde? -Pregunto Emma.

-Pues miren, vamos a ir al kiosco del zócalo a las 5 de la tarde, y de ahí iremos al negocio de un maestro llamado “Gelato”, queda cerca de ahí y aparte ya hablamos con el maestro y acordamos que nos dejaría un espacio.

-De llegar a poder les aviso. -Respondió Emma.

-Igual yo.

-Sale pues. -Dijo despidiéndose con la mano y yéndose junto con el compañero que le acompañaba.

Mire a Emma, estaba feliz de que esta se animara un poco a la idea de ir, no porque a me gusten las fiestas o algo por el estilo, sino porque sabía que era señal de que su ánimo empezaba a subir, y sé que eso la ayudaría.

- ¿Entonces si vas a ir? -Le pregunte sonriendo.

-Te digo que no estoy segura, pero ya viste que nos invitaron y pues sería grosero rechazar la invitación a secas. - Me dijo guiñando el ojo y sonriendo, lo que me hiso asumir que si va a ir. - Y dime, ¿tú vas a ir al final?

-Pues no lo sé, depende de si me dé tiempo y tenga permiso, pero bueno, ¿Qué era lo que te estaba diciendo?

-Lo de tu sueño, estabas contándome del paisaje de un árbol gigante y montañas.

-Cierto, pues bueno yo había visto eso, y de repente, aquí viene la parte más interesante ahora sí, es que escuche una vos que me hablaba, pero era en plan tipo eco, o no sabría cómo describirlo, y de repente me empecé a marear, pero así exagerado y acabe desmayándome, ahí fue cuando por fin desperté en mi cama. 

-Tu sueño sí que estuvo extraño

-Lo sé, pero es que se sintió muy real, casi como si de verdad estuviera ahí, ¿tú que explicación le hallas?, a ti te gustan mucho estas cosas.

-No sé, cuando llegue a mi casa voy a investigar, en cuanto encuentre algo te lo digo.

-Okey

Justo en ese momento mi primito vino corriendo hacia mí, yo me puse a la defensiva por si acaso quería arremeter contra mí con una patada a un codazo nuevamente para yo contrarrestarlo con cosquillas, pero no, en lugar de eso me dijo:

-Oliver, mi tía te habla, dice que te despidas porque ya nos vamos.

Antes de poder decirle algo este se fue corriendo, me asome a ver dónde estaba yendo y en efecto, se dirigía junto a mis familiares hacia la salida, por lo que tenía que apurarme. Me despedí de Emma prometiendo que le hablaría más al rato y le confirmaría si iría o no a la fiesta. Hecho esto me levante y me apure a seguirles el paso hacia la salida.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

LO QUE OCULTAN LAS HOJAS CAP 8

CAPITULO 8 DESPIERTA, YA LLEGAMOS   Ya llevaba un buen rato caminando, estaba atento del rudimentario camino de tierra para no tropeza...